Ahora que abandonamos los abrigos, los paraguas y la prisa
Ahora que ya no hay nada en la nevera, solo melón y gazpacho, ahora que ya no me persigues con tu mirada voy a comenzar a vivir.
Dejo la culpa en un rincón junto a tu miedo, dejo la angustia y las plantas muertas, ya no quiero tus maletas.
Me llenaré de salvia y me acompañará el amor, el abrazo desmedido y las risas.
Despreciaré tu indiferencia y tendré fuerza para escapar de tu red de amor oscuro.
Se acabaron las comidas para dos, escoger la película, llorar y esperar, llorar y esperar.
Ahora las ventanas están abiertas todo el día y las persianas subidas. No hay zapatos por todas partes y trozos de papel.
No existen ya las pantallas, la música recorre los pasillos envuelta de azafrán.
Vienen a verme mis amigos y bailo sola.
Ahora que todo empieza de nuevo y los dos hemos cambiado, a tu lado y al mío voy a comenzar a vivir.