Pensamiento, déjame ser, no detengas mis impulsos, quiero ser libre de juicios, después, al caer la noche seré de nuevo tu presa.
Déjame ser absurda, inventarme gestos y hablar en grumelot, déjame cambiar rápido de emociones y pensamientos, reírme de la gente que pasa e imitarla, beber vino después del gimnasio y reírme con videos de caídas.
Pensamiento, déjame poder irme a mitad de una función si no me cautiva, déjame no pertenecer a ningún grupo social establecido, déjame no sentir la necesidad de ver series y hacerme selfies.
Déjame volar y no tener miedo a decir lo que pienso, a no dudar de mi , déjame comer langostinos siempre que quiera y abrazarte sin que te incomode, asfixiarte de amor, hacerte platos inventados, mirarte sin que te des cuenta.
Déjame ser pues a la noche seré la diana perforada en el cabecero, el bombardeo de mis movimientos, la aguja sin enhebrar, la senda del vacío.